No Valores Por Su Portada

No todas las biografías tienen el mismo interés. Depende de la época, del personaje y de nuestros intereses. Aunque toda persona tiene en sí un valor insustituible, pocas son, sin embargo, biografiadas. San Josemaría Escrivá es un hombre egregio, con una personalidad firme y aspiraciones trascendentes. Es un ejemplo de santidad para el hombre de la calle. En su vida los detalles reflejan magnanimidad. Pocas personas han conjugado tan bien el detalle concreto con la visión amplia, lo particular y lo universal, la tierra y el cielo. Es una persona digna de ser conocida, pues su vida es un perfecto entramado de virtudes humanas y sobrenaturales.

Para muchos es un libro leído y para otros ignorado, al no agradarles la literatura fantástica. No es un libro más de los miles que se editan al año. Se ha escrito mucho sobre su autor y el contenido del libro, por lo que omito el argumento. En todo caso es una epopeya su contenido. Algunos se identifican con el hobbit, una raza de seres que recibe un encargo superior a sus fuerzas. Le acompaña un joven criado, Sam, que tiene menos poder que el hobbit y es consciente. Gandalf es un mago poderoso, pero no tanto como para luchar contra Sauron, quien aspira a tener el anillo que lleva Frodo. Un mundo de hobbits, elfos, magos y otros personajes variados. Tolkien creo un universo para que vivieran en él los personajes de este relato. Todo parece indicar que sí quiso darle un sentido simbólico, si bien algunos van más lejos de lo que el autor pretendió. Se puede aprender mucho, si el alumno está dispuesto. Se dejará cuando el lector vea que la lógica habitual no rige en este relato. Que ca

Varias novelas del autor giran alrededor de la familia de Luis María Monroy; este vástago de la familia, tras sufrir cautiverio en Estambul, regresa a España. Pocos meses después de llegar a la casa familiar, es propuesto para recibir la Orden militar de Alcántara. Debe cumplir el requisito llamado noviciado, de un año, en un monasterio. Nombrado caballero de esa Orden Militar, recibe el encargo real de ir a Estambul; allí entrará en contacto con una antigua familia de judíos portugueses, que le permitan conocer los planes previstos en Estambul para hacerse con el Mediterráneo. El autor sitúa la acción entre 1568 y 1570, bajo el reinado de Felipe II, quien se enfrenta a la amenaza del imperio turco y la guerra en Flandes. Monroy viaja como comerciante turco, acompañado por otro joven de noble cuna y por un especialista en tejidos, un empleado del monasterio de Guadalupe. El secreto rodea el viaje y un error supone jugarse la vida. Llegan a Venecia y desde allí salen rumbo a Estambul

Reedición de un excelente libro que se apoya en el conocimiento de libros de quien fuera Premio Nobel de literatura y uno de los más conocidos críticos del sistema soviético. Además Pearce tuvo la oportunidad de entrevistarle, cuando ya apenas concedía entrevistas, al desparecer de la escena pública. El escrito ruso que había descrito los gulags de la URSS. Al salir a Occidente sufrió una gran decepción al ver que la sociedad consumista tenía muy poco interés en conocer lo ocurrido en la Unión Soviética. Algunos intelectuales que defendieron el comunismo, en sus diversas variantes, no querían recordar aquellos momentos. En 1978 pronunció un discurso en Harvard; a partir de ese momento fue sentenciado al silencio. El premio nobel quizá perdió la esperanza en una sociedad que no quería conocer la realidad. Pearce habló con él y logró un testimonio, que no único pero que es de gran valor para quien desee conocer la historia de esas décadas descritas.

Obra del filósofo y empresario mexicano en la que plantea tres cuestiones básicas: El fundamento de la dignidad de la persona humana, la selva de lo superfluo y escalada hacia las propias cumbres. Los títulos de los capítulos dos y tres corresponden al planteamiento del libro como un viaje. El primer capítulo responde a ¿dónde estoy? Llano va a la raíz de los retos del hombre en el siglo XXI. Muchas personas desconocen el fundamento de su identidad; si el ser humano es un paso más en la cadena evolutiva de la materia, no tiene sentido hablar ni de dignidad ni de finalidad. Llano apuesta con decisión por el sentido trascendente de la persona; con una dignidad tan alta que le convierte en el único ser de la tierra que tiene su fin en sí mismo. El ser humano no puede ser usado como medio, pues le cosificaría y sería tratado de una manera disconforme a su dignidad. En el segundo capítulo aborda un tema muy actual; como el ser humano tiene cuerpo, necesita bienes materiales, de los que un

Libro valiente, en el que una madre de cuatro hijos se cuestionar temas tabúes en algunos ambientes. Su mensaje es positivo. Insiste en la capacidad de asombro que, por naturaleza, tiene el niño y que no precisa de una estimulación superior a la ordinaria. Respetar los ritmos de la naturaleza lleva a no intentar adelantar aquello para lo que no ha llegado el momento –como no se intenta que los embarazos duren ocho meses en lugar de nueve- , que luche por apoyarse en la capacidad de asombro que tiene el niño de por sí; se niega a robarles la infancia involucrándolos en un mundo a medida de los adultos, sean educadores o vendedores. Un ejemplo ayuda a pensar. En Finlandia un alto porcentaje de los niños entre 0 y 3 años están sin escolarizar y no supone taras en su aprendizaje, más a la vista de los resultados de las pruebas que desde hace unos años se repiten. Escolarizar a niños de 0 a 3 años puede ayudar a las familias que necesiten que su hijo esté atendido durante varias horas per

La autora le da el subtítulo mis recuerdos de san Josemaría. Kücking nació en Colonia en 1936; por su edad los recuerdos que guarda de la guerra mundial son los propios de una niña pequeña a la que no se le explican las dificultades, quizá ni siquiera cuando su padre fue movilizado, en la segunda mitad de la guerra, y pasó por dos campos de prisioneros antes de regresar. La vida de Marles en esos años de infancia y primera juventud son los propios de esa edad. Estudió en un colegio católico, religión que practicaban sus padres. En un viaje de estudios organizado desde el colegio, fueron a Roma y allí, entre las actividades que realizaron, fue visitar a una conocida de una de las profesoras que les acompañó. Fue el primer contacto de Marles con el Opus Dei, pero supo con seguridad que ese sería su camino de santificación. En 1955, junto con otras estudiantes, asistía regularmente a medios de formación que daba un sacerdote del Opus Dei. Antes de terminar el bachillerato pidió ser admi

En varios libros anteriores, este formador de empresarios y de jóvenes universitarios, había dejado claro que la magnanimidad es una virtud esencial para el líder. Los líderes son personas que inspiran a los demás para dar de sí el máximo de sus posibilidades; no tanto con técnicas sino potenciando las cualidades que los clásicos griegos trataron y que en siglos posteriores otros autores han completado. La magnanimidad es una actitud favorable hacia empresas grandes; no es un soñador a quien le gustaría hacer eso que dice, pero que lo abandona para volver a su vida cotidiana. Relata el autor como en un curso a directivos, un asistente le preguntó que líderes le habían influido más. Tras pensarlo un instante, contestó que sus padres. En otro momento del libro dice qué aprendió de cada uno de sus antepasados; sin ser exhaustivo señala algunos rasgos. De un pariente relata los efectos del vació que dejó en los países comunistas la falta de formación. Le pudo costar la vida contrastar es

La autora, intelectual norteamericana, estudia la secularización en occidente, si bien en ocasiones distingue entre Europa y EE. UU., al final del libro considera que el futuro será similar. En su afán de rigor intelectual tiene en cuenta excesivas variables, lo que hace compleja la explicación por las continuas referencias a estadísticas de países y épocas varias. Se abre paso la tesis de que el cristianismo y la familia son como una hélice que avanza a la vez; el declive de una dimensión repercute en la otra; de la misma forma, la mejora de un factor facilita la del otro. Los capítulos finales los dedica a aspectos que fomentan una visión negativa u optimista del futuro próximo. No concluye en nada firme, pues los efectos de la crisis económica son duros pero coyunturales Hay que pensar en la recuperación del valor de la familia, sabiendo que es probable que el Estado no cubra necesidades que el Estado del bienestar atendía hasta hace poco. El libro deja un final abierto, porque el

Contreras, fruto de su formación y larga experiencia, explica que la vida familiar se teje con pequeños detalles que llama secretos. La relación hombre-mujer no es fácil y para que la convivencia mejore, hay que trabajarla día a día. Compartir la vida es un proyecto con firme decisión de permanencia, lo que requiere elegir y distinguir lo secundario de lo esencial. En el amor hay que aprender a crecer, porque no es ni solo ni esencialmente un sentimiento. Aborda la sexualidad entendida como una relación entre personas, no entre cuerpos, abierta a la vida. Reflexiona sobre los hijos, sabiendo que es en el hogar donde aprenden a amar. Para los hijos ser amados es esencial, también cuando llegan las dificultades. Cambian las formas de manifestarlo, pero no el amor hacia cada hijo y entre ellos. Esa tarea requiere tiempo; no se educa corriendo, sino por contagio. Quien aprende a vivir esos secretos que comenta cita y apuesta por la familia día a día, pasará por momentos difíciles pero ha