Stowe, H. B.: La cabaña del tío Tom.

Novela ambientada en los Estados que configuraban la Unión que daría lugar a Estados Unidos. Fue publicada en 1851. En 1861 comenzó la guerra civil que dividió al Norte y Sur hasta la victoria del Norte en 1865, año en el que se emitió la ley que prohibía la esclavitud en Estados Unidos. La realidad, tardó más tiempo en imponerse. En la novela, ambientada en una finca de Sur, Mister Shelby atraviesa una grave crisis económica y vende al esclavo Tom y al niño Harry (hijo de Elisa y Jorge). Elisa, al enterarse de que el señor Shelby ha vendido a su hijo Harry a un tratante de esclavos huye con su hijo a Canadá. Ella y su hijo llegan a la casa del senador Bird, quien los lleva a la casa de Van Trompe donde se quedan hospedados. El senador Bird acababa de votar a favor de severos castigos a quien acogiera a un esclavo fugitivo, pero su esposa no acepta sus argumentos y consigue salirse con su decisión. Haley se lleva al esclavo Tom en un barco; allí conoce a una niña, Evangelina a la que salva de ahogarse. Su padre, Agustín Saint-Claire, compra a Tom al negrero y Tom irá a vivir a la casa de sus nuevos dueños en donde será bien tratado. Evangelina muere por una enfermedad y su padre da libertad a Tom, como le había prometido a su hija antes de morir. El señor Shelby muere al separar a dos hombres en una pelea. Tom no quiere irse de la casa de Saint-Claire; pero la mujer de este, mujer de carácter complicado, lo vende a Legrée, dueño de una plantación de algodón. Tom, por desobedecer las órdenes de su nuevo amo es azotado hasta quedar moribundo. Shelby no llega a tiempo para rescatarlo; lo encuentra al borde de la muerte por la paliza recibida. Su antiguo amo entierra a Tom y regresa a Kentucky; mientras, Jorge, Elisa y Harry consiguen llegar a Canadá. La novela afronta la esclavitud desde un prisma religioso; hay pastores protestantes que defienden la esclavitud y otros la abolición. La novela atrapa al lector, pero lo hace con argumentos emocionales; apenas se habla de la igual dignidad humana entre unos y otros. Si el amo es buena persona, tratará bien a los esclavos; si no lo es, puede llegar a matarlos. En el fondo, la situación de los esclavos depende de cómo sean los amos, no de una ley que proclame la igualdad de derechos ante la ley. La cabaña de Tío Tom tuvo un gran impacto en la opinión pública, pero la igualdad de derechos y de oportunidades tardó varias décadas en asumirse como un derecho.