Sarráis, F.: Familias en armonía.


El autor tiene amplia experiencia vital, docente y profesional, de ahí que las ideas que aquí expone de forma divulgativa vienen avaladas por aciertos y fracasos que ha visto en su experiencia citada. La premisa previa para que una familia funcione es que el matrimonio se quiera entre sí. Los hijos aprenden más de lo que ven que de los que se les dice. Comienza el libro señalando rasgos positivos y negativos que ayudan a crecer si se fomentan los primeros y se procura corregir los segundos. Tener proyectos comunes fortalece los lazos que unen al matrimonio. La educación de los hijos lleva a exigirles y Sarráis ofrece diversas formas de configurar una familia por el modo de ejercitar la autoridad. Una idea que destaca es educar en libertad, lo que junto a mandar los dos, en la misma dirección, evita una mala dualidad de poli bueno-poli malo. También ofrece ideas valiosas para los docentes, dentro de cuya labor está ayudar a formar personas equilibradas, con una personalidad desarrollada de forma armónica. El papel que juegan la razón, la voluntad y la afectividad es patente para todos. La madurez personal no es algo que se logra y se olvida; requiere un cuidado constante, pues casi todas las variables pueden mejorar o deteriorarse. Destaca el orden y claridad de la exposición. Como bien dices, son muchas las personas que han dicho varias de las ideas que comenta, pero considerarlas de nuevo ayuda a mantener viva la decisión por cuidar la familia, donde uno es querido y quiere, en un aprendizaje que no decae.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Índice

Fulwiler, Jennifer: Un encuentro inesperado.