Olaizola, J. L.: El camino de las estrellas.
Olaizola, J. L.: El camino de las estrellas. Ed. Palabra, 2017. NOVELA HISTÓRICA
En el siglo IX, unas décadas antes de que se difundiera la costumbre de peregrinar a Santiago, un caballero del Pirineo francés, Jacobus de Arlaiz, comienza desde Saint-Jean-Pied de-Port, un camino que pasa hasta la actual ubicación de Roncesvalles, que sigue hasta Pamplona, Estella, etc., dando las pautas para el llamado camino francés, pues parte de allí y es una de las posibles rutas a seguir durante siglos por peregrinos, muchos europeos que entran en España por el camino indicado. El libro relata de forma amena la razón del Camino de Santiago, a la vez que sazona con anécdotas el viaje un relato que para quien conozca poco de esa costumbre muy difundida, con tradición de siglos, le ayudará a conocer mejor su contenido. Hay muchas personas que lo hacen durante semanas, pero también están los que cada año hacen un tramo nuevo al no disponer de tiempo para hacer de continuo ese recorrido. Atravesar la península Ibérica en el siglo IX, ocupada en buena parte por los musulmanes, requería seguir una ruta que fuera por encima del recorrido del río Duero; el autor introduce nuevos personas a lo largo del recorrido, por lo que difunde la devoción al apóstol Santiago a la vez que relata incidentes del viaje o motivos por los que algunos peregrinos se suman a esa expedición. La variedad de personas y de lugares le permite reflejar la sociedad cristiana en la península Ibérica en el siglo IX. Servirse de las estrellas para seguir una ruta acertada era un recurso que requería cierto conocimiento y cielos despejados. La Vía Láctea era una buena pauta de orientación; de hecho durante siglo se usó, pues se extiende de este a oeste para llegar a Santiago de Compostela.
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